Interesante palabra que define con el mal gusto que deja en el paladar al ser pronunciada… a determinados bárbaros.
Su absurdo bar-bar sirve como metrónomo a sus pasos, a sus palabras, a su aspecto.
Sus meras existencias me dirigen al esnobismo más radical, al egoísmo más intrincado… a la verdadera esencia de mi ser.
GRACIAS, ya casi había caído en el olvido mi extraordinario ser.